«La jornada ha sido perfecta», era ayer en Villoslada el comentario más repetido entre los participantes en la XIV Marcha Hoyos de Iregua. También entre los organizadores, Fundación Caja Rioja, que un año más puede hacer balance exitoso de la cita senderista más importante de la región.
 
Casi un millar de participantes (910 inscritos y unas sesenta personas en las labores de coordinación y asistencia) recorrieron el Parque Natural de Sierra Cebollera por términos municipales de Villoslada, salida y llegada de la prueba, Brieva y Ortigosa. Un itinerario de treinta kilómetros de dificultad media-alta, con una subida principal, al Cabezo del Santo (1.855 m.) en el kilómetro 11.
 
Era la primera vez que la marcha coronaba esta cima, por cuya base discurrió en la edición del año 2000 camino de Brieva. Fue el punto más duro, donde se registraron algunas retiradas. Un total de 19 personas no pudieron terminar la caminata. Pero no hubo más incidencias que pequeñas lesiones por ampollas o torceduras.
 
También hubo quien cubrió la distancia corriendo, siendo el logroñés Raúl Pérez, como en las últimas ediciones, el primero en meta; lo hizo en 3 horas y 20 minutos. Tras él llegaron atletas como Bartolo García (de Escoriaza), Gregorio Ascacíbar (Pradillo), Pedro Rolando (Logroño), Juanjo Arámburu (Zumárraga) o Luismi García (Santo Domingo).
 
El grueso de participantes llegó a partir de seis horas y los últimos en diez, cerrando el control a las seis de la tarde.
Todos ellos pudieron disfrutar de una jornada soleada y espléndida (fría a primera hora, con cero grados a las ocho de la mañana y entre 12 y 15 a partir de mediodía). Como siempre, el trabajo de Sherpa fue impecable.Fin